Implantes

Un implante es una pieza de titanio que sustituye a la raíz natural de un diente perdido que se debe extraer. Se coloca en el hueso mediante una pequeña intervención, y sobre este, se coloca una corona de cerámica reemplazando a la pieza perdida.

La finalidad de un implante dental es recuperar las funciones masticatorias y estéticas, gracias al diseño de una corona que logra una apariencia natural.

Las técnicas quirúrgicas y protocolos han ido evolucionando desde el inicio de la implantología en 1982. Algunos de ellos permiten mejorar el resultado final, la calidad de vida del paciente o acortar los antiguos plazos. Entre ellos: los implantes inmediatos que se colocan el día de la extracción, el protocolo de carga inmediata (en el que ponemos coronas provisionales el mismo día de la colocación del implante), o la preparación de la zona mediante injertos óseos. En cada caso concreto tras la evaluación por parte de nuestros doctores, se aplicará la más apropiada.